Solución · Automatizar citas y atención

Has llegado hasta aquí porque eres responsable y resolutivo…

Te montamos un sistema que atrae, filtra y nutre contactos de calidad para que hables solo con quien sí tiene intención.

Quiero automatizar mi agenda Ver cómo funciona

Lo que suele pasar

Sin un sistema claro, el trabajo rebota… y siempre termina en el mismo lugar.

No porque el equipo no quiera asumirlo, sino porque le falta definir qué filtra, qué automatiza y qué se delega. Y cuando no hay proceso, todo depende del esfuerzo individual… hasta que te vuelve a tocar a ti.

Las consultas llegan por todos los canales sin ningún filtro.
Nada decide qué entra, ni cómo debe gestionarse.

Las dudas se repiten porque no existe un proceso que las absorba.
El equipo responde como puede, no como debería responder el sistema.

Las citas y solicitudes avanzan solo cuando alguien interviene.
La agenda depende siempre de disponibilidad humana.

El esfuerzo individual acaba convirtiéndose en el cuello de botella.
No es falta de voluntad: es falta de estructura.

No necesitas trabajar más.

Necesitas un sistema que trabaje contigo. Y ahí es donde Keelia toma el timón.

Qué incluye la solución

Decidir te hace avanzar. Reaccionar te frena

Trabajamos tu sistema de citas y atención desde la raíz: ordenamos lo que entra, automatizamos lo que consume tiempo y conectamos todo para que tu equipo y tu agenda respiren.
Tres pasos claros para entender qué hacemos y qué ocurre después.

Que cada mensaje vaya a su sitio… y tú puedas centrarte en lo importante

“No puedo estar pendiente de mil canales al mismo tiempo.”

Revisamos todos los canales donde te llegan mensajes WhatsApp, Instagram, correo, formularios y los organizamos para que cada cosa termine donde corresponde. Las dudas van a dudas, las solicitudes a solicitudes y lo que no toca deja de interrumpirte. Todo entra ordenado sin que tengas que estar controlándolo tú.

Mensaje, estructura y recorrido del cliente

La IA responde automáticamente las preguntas de siempre, pide la información que falta y detecta cuándo alguien realmente quiere avanzar. Tú no tienes que repetir lo mismo cada día ni vigilar el móvil: solo recibes lo que merece tu atención.

Una agenda que se organiza sola y te libera de perseguir confirmaciones

Las citas se reservan, confirman y recuerdan solas. El sistema avisa, reprograma cuando hace falta y registra cada interacción sin que tú tengas que estar detrás. Tu agenda siempre está al día y tu equipo trabaja con más calma y menos presión.

Cuando entiendes a quién quieres atraer, todo lo demás se ordena.

Cómo trabajamos

Un método para que cada contacto reciba la atención que merece

Tres fases que ordenan la relación con tus clientes desde el primer mensaje, para que cada interacción tenga propósito, claridad y el nivel de atención adecuado.

Fase 1 · Entender qué pasa y proponer soluciones

Semanas 1-2

  • Observamos y analizamos cómo llegan los mensajes, dónde se pierde más tiempo y cómo responde el equipo.
  • Revisamos qué información circula entre canales y qué queda fuera del proceso.
  • Identificamos qué automatizar, qué guiar y qué debe seguir siendo atención humana.

Fase 2 · Construir el sistema que organiza la atención

  • Definimos cómo debe responder el sistema según intención, prioridad y contexto.
  • Creamos un flujo que clasifica, ordena y conecta mensajes, agenda y recordatorios.
  • Integramos las herramientas necesarias para que todo funcione como un único recorrido.

Fase 3 · Activar el sistema y ajustar en uso real

Semanas 7-10

  • Probamos el sistema con clientes reales para observar cómo funciona en práctica.
  • Ajustamos tiempos, mensajes y reglas para alinearlos al ritmo de tu negocio.
  • Refinamos decisiones automáticas para lograr una operación más estable y predecible.

La buena atención no depende del tiempo que tienes, sino del sistema que la sostiene.
Ese sistema es lo que construimos contigo.

«Cuándo si…«

  • Tu comunicación diaria es activa y ya no puedes gestionarla con claridad.
  • Respondes muchas veces lo mismo y quieres recuperar tiempo sin perder calidad.
  • Te importa que cada persona reciba una atención profesional en todo momento.
  • Necesitas un sistema que prepare y organice todo antes de que tú intervengas.

«Cuándo no…»

  • Buscas más volumen sin importar la calidad de las conversaciones.
  • No tienes clara tu oferta o tu proceso de atención y no quieres revisarlo.
  • Quieres automatizar incluso aquello que requiere trato humano.
  • Prefieres seguir improvisando en lugar de trabajar con un sistema estable.

Cuando la atención se ordena, la confianza se mantiene.

Y cuando no, todos lo notan.

Problemas que se alargan, respuestas inconsistentes, pasos sueltos y una sensación de desgaste que no ayuda a nadie.
El objetivo no es “ir más rápido”, sino crear un recorrido claro para que cada persona reciba lo que necesita sin confusión y sin saturar a tu equipo.

Así cambia la operación según el tipo de negocio:

Consulta privada o clínica

Un recorrido claro que reduce fricción y evita conversaciones innecesarias.

El sistema identifica el tipo de consulta, detecta prioridad y muestra horarios disponibles sin que tengas que intervenir.
La persona avanza con la información justa y confirma su cita en un solo paso.

Menos interrupciones y menos horas perdidas en coordinación.

Programas de alto valor

La persona recibe el contexto que necesita, aclara dudas básicas y comparte información relevante sobre su situación.
El sistema detecta si existe encaje real y solo entonces propone agendar contigo.

Hablas solo con quienes valoran tu tiempo y están listos para avanzar.

Negocios de Alta demanda

Los contactos siguen un recorrido claro: servicio, precio, disponibilidad y reserva, sin pasos sueltos.
Cada cita queda registrada y confirmada automáticamente, reduciendo el ida y vuelta constante.

Menos saturación diaria y más tiempo para lo importante.

Preguntas frecuentes

No. Un chatbot puede responder; este sistema entiende, clasifica y aprende.
Diseñamos el recorrido completo de atención y cita: prioridades, disponibilidad, contexto y seguimiento.
No es una ventana que habla: es una estructura que sostiene cómo atiendes y mejora con el uso.

Todo lo contrario.
La automatización reduce el ruido y te deja más tiempo —y mejor energía— para las conversaciones que sí requieren criterio humano.
El agente sabe cuándo avanzar solo y cuándo debe derivar al equipo, manteniendo siempre el tono y los límites de tu negocio.

Nada. El recorrido está pensado para ser claro incluso para quien no entiende de tecnología:
pasos breves, decisiones evidentes y mensajes que no generan duda.
La persona siempre sabe qué hacer y qué ocurre después.

No.
Partimos de cómo ya atiendes hoy y ordenamos el proceso para reducir fricción.
Nada forzado, nada artificial: simplemente un sistema que hace coherente lo que ya funciona y elimina lo que te hace perder tiempo.

Te entregamos todo documentado y con plantillas editables para que puedas ajustar textos, pasos u horarios cuando lo necesites.
Y si lo prefieres, te acompañamos en una fase de mejora continua para que el sistema siga aprendiendo y evolucionando con tu negocio.

Cuando tu sistema se ordena, tus resultados también.

Nada mejora por casualidad.

En captación como en cualquier parte del negocio, la causa siempre precede al efecto.
Si el recorrido es confuso, atraerás confusión. Si el sistema es claro, atraerás oportunidades claras. Un negocio no crece respondiendo más… crece ordenando cómo responde.

Y ese es exactamente el trabajo que hacemos contigo.

Mejorar mi atención Analizar mi operación